Renegado

Me abrí paso a través de inauditos infiernos y heladas montañas. Rehusé a la muerte en incontables ocasiones. Recorrí el mundo entero en pos a un único objetivo; luchando contra mis enemigos, sembrando la muerte por doquier; sin un ápice de piedad. Sin descanso… sin demora.
Todo lo hice por ti, pues tu voluntad es más fuerte que la mía. Me pediste que matara, y maté. Me arrojaste al abismo, y lo acepté. Me gritaste en mis horas más bajas –cuando más apoyo necesitaba-, y nada te objeté.
Y cuando al fin alcanzo la victoria; cuando logro derrotar al peor de mis enemigos y restauro la paz en la Tierra, ¡cuándo podré ser recompensado por mis heroicos actos!.. detienes mi mundo y escribes cruelmente en el firmamento: “Fin de la Partida”.

No hay comentarios: